“Los procesos de degradación socioambiental inician a finales del año 2000, cuando el municipio de Tlaquepaque en 1998 aprobó por primera vez el reglamento de planeación para el desarrollo municipal, documento institucional que orienta la operación pública del cambio de uso en el suelo mantenido hasta la actualidad. En esta investigación me enfoqué en entender el impacto que tienen los procesos de degradación, una vez que se acelera, en la salud de los habitantes; relacioné y comparé dos tipos de poblaciones, a las que clasifiqué en estudio y no enfermo para poder exponer, a partir del análisis cualitativo y cuantitativo no paramétrico, las relaciones existentes entre estos grupos y algunas variables asociadas a contaminación atmosférica y al proceso salud – enfermedad, tanto a partir de los resultados de la prueba como de sus propias narrativas.
Del análisis de la información obtenida en las 43 Pruebas Espirométricas (PESP), realizadas a niños y niñas que viven en la zona y a partir de aplicar una estrategia etnográfica amplia que partió de la Historia Clínica Ambiental Etnográfica (HCAE), encontré que 12% de niños y niñas presentaron resultados Fuera del Rango Esperado (FRE) en las dos pruebas espirométricas realizadas. Del análisis etnográfico y a partir del conocimiento del medio ambiente y la salud respiratoria de niños y niñas y sus familiares, en específico las madres, encontré que el 17% consideraba, antes de la prueba espirométrica, que sus hijos e hijas debían ser incluidos en el grupo de estudio por ellos considerar que se encontraban frecuentemente enfermos, pues presentaban síntomas relativos a enfermedades respiratorias”.